lunes, 5 de diciembre de 2011

Segunda ola de la música pop. Los Beatles y la invasión británica.

En  1962 aparece en Liverpool un grupo formado por dos guitarras, un bajo y una batería, son los Beatles, que suponen una verdadera revolución dentro del panorama musical: ante todo constituyen una síntesis entre el ritmo del  primer rock y la tradición coral inglesa. En 1962 lanzan su primer disco "Love me do" y durante siete años fueron la primera fuente de exportación británica. En 1964 llegan a Estados Unidos y consiguen marcas imposibles de superar, como el hecho de colocar simultáneamente cinco canciones en los cinco primeros puestos de las listas de discos pequeños y dos álbumes en los de las listas de LP's.

Su influencia fue enorme en todo el mundo y sus canciones fueron traducidas a todos los idiomas, en España lo hicieron los Mustang y su réplica fueron los Brincos.

 Pero lo más importante del grupo británico no fueron sus récords, sino su capacidad para evolucionar por delante de sus competidores. Empezaron con la psicodelia, iniciaron la penetración de instrumentos y ritmos hindúes, utilizaron grandes orquestas en sus discos, fueron precursores del rock sinfónico, devolvieron al público el gusto por el rock, hicieron letras sociales...y para ello se basaron en su innegable talento, en las armonías de gente como Everly Brothers o Buddy Holly y en los ritmos de grupos como Marvelettes o Shirelles, muchas veces despreciadas en su propio país.

            La invasión británica

Junto a los Beatles surgieron en Gran Bretaña otros grupos que, entre los años 1964-65 invadieron literalmente el mundo de la música pop, fueron the Animals y los Rolling Stone, estos últimos representaron la cara agresiva del pop inglés, que entroncaba directamente con el rhytm and blues y contrastaba en cierta medida con la imagen educada y asimilada de los Beatles.

La lista de grupos nacida en la estela de este trío resultaría interminable, pero entre ellos algunos nombres resultan valiosos como demostró después su propia evolución, así los Moody Blues, que desembocarían un par de años más tarde en el rock sinfónico, los Bee Gees, puntales luego del sonido disco o los Who, autores de óperas rock como "Tommy" o "Quadrophenia".

En España destacaron los Bravos, que consiguieron imponerse en el mercado inglés gracias a su cantante de origen alemán Mike Kennedy, su carrera fue breve pero  sirvió para demostrar la internacionalidad de la música pop.


Primer período de transición

High School

En el plazo de un año, 1958, Elvis presley se marcha al servicio militar, Chuck Berry ingresa en prisión, Little Richard se convierte en predicador, Buddy Holly se mataba en un accidente aéreo y Jerry Lee Lewis sucumbe al escándalo de una boda "maldita" con una belleza sureña de trece años.

           Puestas así las cosas, los editores de las casas discográficas se pusieron a buscar nuevos ídolos capaces de cubrir el hueco dejado por tal cúmulo de coincidencias, surgiendo así una generación de ídolos juveniles, en edad escolar, muy bien reflejada en "American graffitti" o "Grease", son los teen idols o high school.

           Las dos figuras que polarizan la atención del momento son Paul Anka, un canadiense de origen turco, que triunfó con "Diana" y Neil Sedaka con "Oh Carol"


Folk, la canción protesta.

         La constante difusión de música “ligera” por todas partes y sus abusivas campañas de marketing, provocaron el rechazo de un grupo de intelectuales y músicos neoyorquinos. Como reacción, se lanzarán en busca de las verdaderas raíces de la música americana recopilando y catalogando canciones, grabando a viejos músicos, revalorizando la guitarra acústica y reeditando obras antiguas.

        Entre estos músicos destacan las figuras de Peter Seeger y Woodie Guthrie que, en la década de 1940, habían representado la voz de los pobres y desposeídos de América poniendo nuevas letras a las melodías tradicionales.

        La canción protesta puso de manifiesto que la música popular podía ir más allá de las canciones de amor y de los sonidos contundentes del rock, que podía reflejar la realidad e, incluso, cambiarla. Puso inteligencia en la música y la hizo madurar, influyendo en todos los compositores posteriores. Grupos como The Beatles o The Rolling Stones comenzarán a divulgar con sus canciones ideas políticas y reflexiones sociales que cambiarán el mundo del pop.

domingo, 20 de noviembre de 2011

Tecnho- pop

Esta es la época de la cibernética, los instrumentos electrónicos van desplazando a los instrumentos tradicionales de la música rock. Se hace ritmo con una caja programable, se repiten frecuencias de notas a la velocidad que el técnico requiera, se sustituyen músicos por máquinas. Y con ello se hace música, unas veces bailable que sigue sirviendo para las discotecas, otras simplemente mecánica y se llama techno- pop y otras, las menos, alguien logra insuflar un soplo de vida a los electrones y surgen prodigios de equilibrio como "Johnny & Mary" de Robert Palmer, uno de los escasos intérpretes que ha logrado dar sensibilidad a esos fondos mecánicos del techno-pop, pero a las vez parece buscar, en su atuendo y apariencia física, algún contacto con los practicantes del nuevo romanticismo.

Los Nuevos Románticos

En los primeros ochenta la crisis de ideas se agudiza, se exprimen las líneas ya desarrolladas anteriormente. Las reediciones de viejos cantantes y canciones se multiplican  Los grupos de new wave con físico agraciado van a resucitar el fenómeno del glamour rock, aunque ahora les llamen nuevos románticos y sus nombres sean Adam and the Ants, Spandau Ballet, Visage, Duran Duran. En general basan su éxito en su aspecto personal pero musicalmente no son más que  una anécdota comercial.
             

New wave

El fenómeno punk, como tantos otros que ha dado la música pop, fue sólo una nube de verano y la mayor parte de quienes se habían apuntado a esta "denominación de origen" siguieron evolucionando hasta aterrizar en lo que luego se dio en llamar new wave o nueva ola.
En definitiva este término viene a ser un cajón de sastre que incluiría a gente como Blondie, que volvió a las canciones de los sesenta, otros como Police mezclaron rock y ska a partes iguales. Pretenders, Ian Dury & The Blockeads, Alaska y los Pegamoides... fueron parte de un movimiento poco coherente al término del cual no quedaron más que canciones parecidas a las de los Beatles, de quince años atrás, 

Punk

A mediados de los años setenta se utilizó este término para designar a una serie de rockeros poderosos y excitantes que  no cabían en ninguna otra definición. ¿Dónde colocar si no a Bruce Springteen o a Pat Smith?.
Pero el término punk  llegaría a hacerse realmente popular en su aplicación londinense: Eddie and the Hot Rods y sobre todo Sex Pistols lo sacaron a la luz, el momento fue una entrevista televisiva en la que Johnny Rotten, el líder de los Sex Pistols, dijo más inconveniencias de las admisibles. La imagen punk de este grupo respondía al talante de inadaptados de sus miembros.
Al amparo del éxito de los Sex Pistols, conseguido a raíz de su versión iconoclasta de "Dios salve a la reina", los grupos punk se multiplicaron y llegaron a afectar otros aspectos de la sociedad, sobre todo la moda y el peinado: ropa de cuero, pelos cortísimos teñidos de verde o rojo.
En España el mejor representante de este estilo sería un muchacho de Vallecas, José Ramón Martínez, Ramoncín, que se pintó un rombo en el ojo y se llenó de imperdibles (otro símbolo punk), sus canciones expresaban toda esa mezcla de agresividad y  frustración que se vive en zonas similares. Como en el caso de los ingleses despertó más interés entre los sociólogos y comentaristas de la actualidad que entre el público.

Reagge

Basándose en ritmos propios, como el ska o el mento, los jamaicanos fueron tiñendo el rock que les llegaba desde los Estados Unidos y el producto final de este trabajo de adaptación se llamó reggae. Ya en los años cincuenta, y de la mano de Belafonte, un ritmo caribeño, el calypso, había llevado cierta cadencia lenta al pop anglosajón.
Boob Marley fue la gran figura que el reggae jamaicano precisaba para convertirse en exportable, poco a poco su música fue siendo descubierta por otros cantantes, Eric Clapton, Joan Báez, Bob Dylan... Era el ritmo de moda y la única esperanza que se adivinaba para cuando declinara el sonido discoteca.
Además de estar en los discos de cantantes de todos los estilos, el reggae abrió los ojos a artistas de otras latitudes para iniciar experiencias similares con sus músicas folklóricas. En España se habló mucho del rock madrileño, del rock catalán  y sobre todo del rock andaluz, producto de una generación que tenía un pie en la copla local y otro en el rock universal como Triana. En otras zonas como Galicia o el País vasco se está haciendo música juvenil sin perder de vista los ritmos propios, las melodías tradicionales, los signos de identidad locales capaces de enriquecer el pop.